El pasado jueves el Bahía de Cádiz visitaba el estadio de la Bazán para enfrentarse al equipo de la isla, en un nuevo enfrentamiento entre mabos equipos.
Era la primera vez en varios meses que el equipo de la elástica roja visitaba este campo, que presentaba un aspecto inmejorable para la práctica del balompié. Pero no era la noche de los gaditanos y desde antes del choque se veía venir, ya que a última hora fallaron los porteros titulares del eqipo, y hubo que echar mano de la improvisación.
Los primeros balones que empezó a tocar el equipo que vestía de negro empezaban a augurar un triste final, ya que carecian de profundida y se limitan a pases horizontales sin ningún tipo de peligro para los defensas azulinos.
La primera ocasión de peligro llegó merced de un fallo del meta visitante. Un balón manso que llegaba a los pies de Sergio era pifiado por este, dejándoselo en bandeja a Javi. El delantero isleño que no se esperaba el error no acertó a introducir el balón en el interior de los tres palos por casualidad. Pues el dispro de este por encima del meta golpeó el larguero quedándose a escaso milímetros de sobrepasar la línea de gol.
Este primer aviso no era mas que la precuela del primer gol. Pedro, que hacía las veces de portero, dejó en bandejaun saque de meta a Javi. En esta ocasión del jugador azulino no falló e hizo subir el primer tanto para el equipo de San Fernando.
Las imprecisiones del equipo rojillo eran cada vez mayores y apenas inquietaban el marco contrario. Así, entre errores y balones en zona de nadie llegó el segundo tanto isleño cuando, un balón regalado por Javi Román provocó una rápida contra que de nuevo Javi acertó a introducir en el interior de la portería gaditana. Dos a cero y cada vez mas cerca la goleada para el equipo que vestía de azul.
Pero, en un balón largo de los que tantas veces anteriormente se había regalado a la defensa contraria, en esta ocasión aterrizó en los pies de Quino. El rápido jugador gaditano, el único junto a Dani Ríos que ponía algo de verticalidad al juego, acertó batir al meta isleño y hacer subir el dos a uno al marcador.
Pero un empate hubiese sido demasiado premio para un equipo que no demostró ningún tipo de virtud sobre el tapete verde del campo de la isla. Así, una jugada en el interior del área gaditana era aprovechada por Gines para sacarse un disparo a la media vuelta y dejar el 3 a 1 con el que finalizó el encuentro.
Un partido para olvidar del equipo gditano que se encontró con la mejor cara de los de los jugadores de la Isla de León.