Festival de goles tras el parón veraniego

El pasado miércoles volvieron los clásicos partidos entre el Chirigoteros CF y el Bahía de Cádiz C.F.. Había pasado más de dos meses desde que ambos equipos se viesen las caras en un terreno de juego, motivado por el parón veraniego y los problemas con las instalaciones.

Ya de principio sor`prendieron las alineaciones de ambas escuadras debido, por una parte, a que aún tienen algunos efectivos en la enfermería y, por otro lado, que algunos jugadores aún se encuentran en la rutina estival.

El equipo que se vio más favorecido con las incorporaciones de última hora fue el que viste de rojo, sobre todo por lo reforzado que quedó en su zona medular. Javi Amezaga y David Lara se hicieron los dueños del centro del campo desde casi el comienzo del encuentro, no pudiendo ni Ginés ni Angel hacerse con el control de esta parcela en ningún momento.

Esto provocaba que la linea mas defensiva del equipo isleño estuviese demasiado alejada de la zona de creación, hecho que facilitaba la presión de los hombres mas adelantados del equipo rojillo. Tanto Quino, como Jaime y Omar comenzaron a adelantar sus posiciones y provocaron con ello el ahogo a la salida de balón de los locales.

Las oportunidades se sucedían una tras otras, pero fue Javi Román, quien tras un disparo en el interior del área que se estrelló en un defensa, quién se aprovechó de un desafortunado rebote en intento de despeje de los azulinos. El intento de sacar el balón de Javi se estrelló en el muslo del mediapunta gaditano y entró en la meta contraria despistando totalmente al guardameta que poco pudo hacer.

Este era el comienzo de un recital de goles como no se veía hace mucho tiempo. La defensa de los isleños era un cumulo de despropósitos y tanto Quino como Omar campaban en las inmediaciones del área local de forma continua, gracias a la gran labor de recuperación organización de los jugadores mas atrasados del equipo de la capital.

Rafa apenas tenía trabajo, siendo un privilegiado espectador del muestrario de goles, de todos los tipos y lugares, que hacían subir al marcador los acertados delanteros. Quino, Omar, Lara y Javi Roman con un hattrick se encargaron de endosarle un serio correctivo de 9 tantos al Chirigoteros, un equipo muy desdibujado y nada reconocible.

Un buen comienzo de temporada que deja el listón de resultados muy alto y que no reflejó la igualdad que suele haber, normalmente, entre ambas escuadras.

Empate con sabor a victoria

Tras el duro revés, más por juego que por resultado, sufrido la semana pasada por el Bahía de Cádiz, este nuevo encuentro se veía como una buena oportunidad para poner en práctica algunas de las medidas acordadas por el vestuario gaditano.

De solo ver el once de inicio podían verse algunos cambios notables, como la inclusión de Javi Amezaga en el centro del campo, y la vuelta de Carlos al lateral izquierdo. Además, el esquema de juego se volvió cambiar, retomando el  4-4-1-1 que tan buenos resultados había dado en épocas pasadas.

Pero lo mas notable fue el cambio de aptitud de algunos de los jugadores más apáticos del principio. Esto se vio plasmado en una presión asfixiante que ahogó durante muchos minutos la salida de balón azulina.

A pesar de no estar preparado que la presión de hiciese tan arriba, el empuje de los rojillos hacía que las líneas se situaran mas cerca del área defendida por los jugadores locales, lo que provocaba un reguero de balones recuperados que provocaron algunas de las mejores ocasiones de gol del partido.

Abel tuvo la primera cuando, un balón colgado al área era pifiado por la defensa, que no acertó a despejarlo. El rápido jugador gaditano no se esperaba el fallo de Demichelis, lo que provocó que reaccionase más lentamente de lo habitual en él, dando la opción a la defensa de rehacerse y anular esta clara ocasión para haber puesto por delante a su equipo.

La presión era efectiva y permitía ocasiones como la de Antonio, que pudo haber adornado su gran partido si el meta isleño no le hubiese detenido un colocado disparo a media distancia. Tuvo que ser el jugador más efectivo de cara a portería el que cambiase el empate en el marcador. Un magistral pase en profundidad de Pedro, que minutos antes había estado a punto de abrir la lata en un potente disparo lejano, era aprovechado por Moi para adelantar a los gaditanos. El delantero resolvió de forma magnífica el mano a mano con el meta isleño, colocando el balón donde no podía llegar.

Minutos mas tarde fue Abel el que pudo decidir el partido en una rápida incursión por banda. Su disparo a puerta salió excesivamente cruzado, en lo que pudo ser el dos a cero.

Esta fue la última gran ocasión para los gaditanos, que a partir de este momento comenzaron a notar el esfuerzo físico realizado. La presión ya no era tan intensa y los centrales no habían acertado a retrasar un poco su posición para contrarrestar este hecho. Así, en un corner a favor del Bahía de Cádiz llegó la jugada del gol que, a la postre, sería definitivo. El saque de esquina botado por Moi en corto era controlado por Antonio que vio la clara subida de Gonzalo, que se sumaba al ataque desde el centro de la defensa. El central no acertó a pegarle al esférico llegando este a los pies de la zaga isleña que envió un rápido pase en largo a Javi que inició la contra. Su carrera por banda izquierda finalizó en un pase de la muerte que Ernesto solo tuvo que empujar al fondo de la portería de Jesús Flores.

Si había una manera de que los isleños, tal como estaban jugando anotasen era esta. La ambición y las ganas de aumentar la diferencia de goles les había causado una mala pasada, permitiendo que se escapase un partido que tenían totalmente controlado.

De aquí al final un disparo lejano de Javi Peña y un par de intentos de contra por parte de los azulinos que fueron bien anulados por Carlos y el resto de la defensa gaditana. Un partido bien jugado que se escapaba en los últimos instantes pero que da una idea de que el equipo de la elástica roja tiene capacidad para jugar bien al fútbol a base de lucha y presión.

PUNTOS MARCA:

• Jesús Flores **
• Gonzalo ***
• Dani Salinas ***
• Carlos ***
• Pedro ****
• Javi Peña ***
• Javi Amezaga ***
• Abel ***
• Javi Román ***
• Antonio ****
• Moi *****

¿Fantasmas del pasado?

Era evidente la mejoría que había experimentado el Bahía de Cádiz en los dos encuentros anteriores, con una clara victoria y un injusto empate. Pero esta tendencia positiva no ha tenido continuidad esta semana con una dolorosa derrota frente al Chirigoteros.

El equipo isleño había aprendido de las semanas anteriores, presentando algunas modificaciones en su once para volver a recuperar el centro del campo. Por su parte, el Bahía de Cádiz volvía a tirar de prácticamente el mismo once de la semana anterior a excepción de la inclusión de Chechu en detrimento de Javi Amezaga.

Desde el pitido inicial se veía claro que los locales no estaban dispuestos a sufrir la pérdida del control de la zona medular y poblaron el circulo central de varios hombres. La recuperación de Javi y la inclusión del debutante Paco comenzaron a crear problemas en la zaga rojilla desde los primeros momentos.

A pesar del aparente dominio azulino, tampoco llegaban de forma clara a las inmediaciones de la portería de Rafa, que no tuvo mucho trabajo a lo largo del partido. Los balones más complicados llegaban de disparos lejanos en posiciones forzadas, lo que denotaba el excelente trabajo defensivo de la zaga de la capital gaditana.

Fue a la salida de un corner cuando el Bahía de Cádiz tuvo su única oportunidad clara. El saque de esquina, botado por Javi Román, era cabeceado con mucha intención por Moi. El balón salió muy cerca, perdiéndose por encima del larguero la ocasión mas clara de los visitantes.

Fué, curiosamente, en otro còrner cuando llegó la jugada que marcaría el resultado final. Un centro de Javi Molero, sin aparentes complicaciones, llegaba a Rafa con toda la ventaja. Al meta se le escapó el balón de las manos con la mala suerte de que le cayó en los pies a Paco, que únicamente tuvo que empujarlo al fondo de las mallas.

El mejor jugador del partido se encontraba con el premio del gol que daba una merecida victoria a su equipo y que cortaba, de tajo, los buenos resultados que habían enlazado los jugadores del Bahía de Cádiz.

Empate que sabe a poco

Como viene siendo habitual los lunes en horario nocturno, se enfrentaban los equipos del Chirigoteros y el Bahía de Cádiz. Los gaditanos venían de cortar una mala racha, que les perseguía desde hacía varias semanas. Los isleños por su parte habían visto, la jornada anterior, como se cortaba su buena racha de juego y resultados.

Con esta premisa comenzaba a rodar el esférico sobre el verde tapete del Campo Municipal La Bazán. Desde un primer momento se podía ver que iban a ser los gaditanos los que querían llevar el peso del partido, como ya hiciesen la semana anterior.

La incorporación de Javi Amezaga acompañando a Pedro en la creación del juego era algo que los isleños no se esperaban, conectando ambos jugadores en todo momento. De esta forma comenzaron a llegar las ocasiones para los gaditanos que poco a poco iban asediando la meta de Cristian.

En una de ellas llegaba la primera jugada polémica del encuentro cuando un balón en profundidad para Abel finalizaba en una dura y peligrosa entrada del meta azulino. La jugada concluyó con el interior rojillo dolido por el golpe y reclamando penalty. La acción terminó con balón para el equipo de la isla en saque de puerta tras interpretarse que el balón estaba dividido.

Esta no iba a ser la única jugada injusta del encuentro, ya que minutos mas tarde una gran jugada de los gaditanos era cortada por un inexistente fuera de juego. Carlos, muy activo como suele ser costumbre en él, rompió en velocidad por el centro para presentarse, de forma correcta, delante del meta isleño. Una jugada que de haberse dado como legar podría haber cambiado el rumbo del encuentro.

Como no hay dos sin tres, Moi, que controló un buen balón en el interior del área azulina, recibió una sonada patada de Eusebio, en su afán por arrebatarle el esférico. La jugada, muy protestada por los visitantes, debído a que la jugada apenas presentaba dudas, no fue señalizada como pena máxima, lo que desquició a los rojillos.

Fue pasada la mitad del partido cuando llegó el tanto de Abel. Un saque de corner desde la izquierda era repelido por la defensa azulina. Tras un par de rebotes el esférico llegó a Abel que, con un toque sutil, levantaba el balón por encima de Cristian en una vaselina perfecta.

Parecía que se hacía justicia con lo expuesto por ambos equipos, a pesar de ser un corto resultado para el equipo de la capital gaditana. A partir de este momento el esfuerzo realizado comenzó a pasar factura por el equipo capitaneado por el goleador, hecho que provocó que los locales estirasen sus lineas y adelantasen su zona de presión.

Además se vieron favorecidos con el cambio de banda de Abel y Antonio, que dejó mas libertad a Orlando para subir por banda y encarar a Gonzalo, que jugó como lateral en este encuentro. Fue en una de estas subidas cuando Orlando consiguió conectar con Demichelis  en el interior del área rojilla. El jugador del Chirigoteros realizó un rápido movimiento y soltó un disparo a la media vuelta que no encontró respuesta por parte de Rafa.

Prácticamente la única llegada a la meta visitante había servido para empatar injustamente el encuentro, y dar por finalizado un enfrentamiento marcado por la polémica y las protestas de ambos contendientes.

¿Fin de ciclo?

Anoche, bajo el aguacero y un frío atípico en la estación primaveral, el equipo del Bahía de Cádiz ofreció una imagen que nada tiene que ver con la de los partidos anteriores. Muchas eran las bajas que presentaba el equipo de la capital gaditana, lo que en un principio supuso un quebradero de cabeza para el cuerpo técnico, ya que no era fácil encajar las piezas disponibles.

Sobre todo con la baja a última hora de Javi Peña, que por un proceso virial, trastocaba totalmente la zona defensiva de los rojillos, provocando que hasta escasos minutos del comienzo del choque no se conociese el nombre que habría de sustituir al lateral gaditano.

Finalmente el Bahía de Cádiz se presentó con Jesús Flores bajo los palos. Defensa de cuatro con Gonzalo y Carlos en los laterales y la pareja formada por Chechu y Gonzalo II como centrales. El centro del campo era el que presentaba mayores novedades, con un trivote formado por Javi Román, Javi Amezaga y David Lara, apoyado por Antonio y Dani Blanco por las bandas. Como suele ser habitual la demarcación de delantero centro fue ocupada por Moi, que completaba un once poco habitual.

Las nuevas incorporaciones supusieron una nueva versión del equipo que habíamos visto en partidos anteriores. Desde los primeros instantes el centro del campo rojillo se hizo dueño del balón, con pases rápidos y precisos que evitaban la habitual presión isleña en la zona medular. Lo jugadores locales apenas podían pasar del centro del campo y las oportunidades del Bahía de Cádiz se iban sucediendo una tras otra.

Dani Blanco, que estuvo muy activo durante todo el tiempo reglamentario, disfrutó de las primeras ocasiones gracias a su velocidad y su desborde por banda izquierda. Pero su poca fortuna de cara a portería y las buenas intervenciones de Cristian evitaron que los jugadores de la elástica roja adquiriese una ventaja demasiado pronto. Moi, que efectuó una gran labor de presión a la salida del balon azulino dispuso de un mano a mano con el meta isleño, pero su intento de vaselina se fue alto por muy poco. Así, en una buena jugada por el centro, tras un mal rechace del guardameta local el balón le llegó a Dani que, a meta vacía colocó el esférico entre los tres palos. El equipo de la capital adquiría una merecida ventaja que podría haber sido mayor si se hubiese acertado con las numerosas ocasiones de gol que hasta entonces había dispuesto.

Fue en otro error del portero local, que tuvo una actuación muy contrastada, el que provocase el segundo gol del Bahía de Cádiz. En otro despeje defectuoso el esférico llegó a las inmediaciones de Moi que, viendo que el guardameta no se encontraba bien colocado, golpeó el balón de forma acrobática tal como le caía. La ventaja de los gaditanos subía hasta dos tantos y los locales aún no habían dado sensación de mejoría.

A partir de aquí la presión asfixiante de los rojillos decaía un poco, debido en parte por el gran esfuerzo realizado hasta entonces. Esto provocó que los jugadores de la isla pudiesen adelantar un poco las líneas y se acercasen más a las inmediaciones de Jesús. El guardameta gaditano evitó el primer tanto isleño al sacar de manera sorprendente un ajustado disparo a la escuadra. Este enorme acierto contrastó con la jugada del tanto del Chirigoteros cuando, en un corner a media altura, no acertó a bloquear el esférico. Este, tras rebasar al meta se encontró con la pierna de Chechu, acabando en el fondo de las mallas del equipo gaditano. Una desafortunada acción que acercaba a los locales en el marcador y volvía a despertar fantasmas del pasado para el Bahía.

De aquí al final las imprecisiones en ambos conjuntos fueron la tónica detonante, sin apenas ocasiones claras para ninguna de las escuadras a excepción de un buen robo de Moi. El delantero le arrebató el balón a Mario, que fue muy bien cubierto por Carlos todo el encuentro, y se fue directo hacia la meta de Cristian ante el que no pudo precisar bien el disparo al ser molestado por el interior azulino. El pitido final dejaba un buen sabor de boca para los jugadores rojillos y, a pesar de estar el campo muy mojado con un esférico difícil de demostrar, demostraron que el compromiso de los jugadores es mayor y a poco que se mejoren algunas cosas, volverá a darnos magníficas noches de fútbol.

PUNTOS MARCA:

• Jesús Flores ***
• Gonzalo ***
• Gonzalo Arce ****
• Chechu ***
• Carlos ***
• Javi Amezaga ****
• David Lara ****
• Javi Román ***
• Daniel Blanco ***
• Antonio **
• Moi ****

Seguimos en el pozo

El Bahía de Cádiz volvía al verde del Campo Municipal La Bazan a intentar mejorar la imagen dada la semana pasada. Un contundente cuatro a cero fue el balance que los jugadores de la capital se llevaron gracias una actuación espectacular de los isleños y, sobre todo, de Ernesto que se comió a la defensa rojilla.

Con la lección bien aprendida, aunque parece que no por todos, el once presentado en esta ocasión a primera vista distaba mucho de lo acostumbrado. El esquema sobre el verde tapete se modificó suprimiendo a los dos laterales y situando a tres centrales y dos carrileros de largo recorrido. La idea era poblar el centro del campo y evitar las cómodas transiciones que en los choques anteriores habían tenido los jugadores azulinos. La otra novedad era la posición de Antonio, que dejaba su posición en banda para acompañar a Moi en el ataque. Una serie de cambios que debían asegurar un control en el centro del campo y una mejoría en lo visto en los últimos encuentros.

Así, durante los primeros minutos esto se hizo evidente, llevando el peso del control del esférico a pesar de faltar profundidad d tres cuartos de campo hacia delante. Y es que la presencia de Moi no era suficiente para doblegar una defensa llena de caras nuevas que refrescaron la zona defensiva del equipo isleño, ganando en seguridad y oficio.

Pero, como viene siendo habitual, fueron los locales los que abrirían el marcador cuando, en un lanzamiento de esquina cabeceado a la frontal del área por Javi Peña, Orlando enganchó un magnífico disparo que se coló por donde crecen las telarañas. Un obús al que Rafa nada pudo hacer y que ponía por delante a los jugadores de la elástica azul.

A partir de aquí los jugadores del Bahía se vinieron a bajo y comenzaron a perder posiciones. La línea trasera intentaba empujar con ímpetu pero sin cabeza, dejando desguarnecida la línea defensiva. El centro del campo era manejado por Gines, Ángel y Molero a su antojo, moviendo a su equipo con sentido y con muy pocas pérdidas de balón. Todo lo contrario de los jugadores de la capital, que lo único que conseguían era correr tras el balón sin inquietar las inmediaciones de Ernesto que, lesionado a los pocos minutos de comenzar el choque, intercambió su posición con Cristian.

Con este panorama la único que podía ocurrir era que llegase el segundo tanto isleño. Fue Ángel el que aumentó la ventaja para su equipo y dejó el encuentro prácticamente finiquitado en una nueva demostración del buen momento por el que pasa Chirigoteros, y el pésimo estado de forma por el que pasa el Bahía de Cádiz. Sobre todo debido a las numerosas bajas que arrastran semana tras semana y que hacen imposible poner en juego el once tipo que tan buenos momentos nos ha regalado.

Previa del partido del lunes 15 de Abril

Chirigoteros vs. Bahía de Cádiz C.F.

Terreno de Juego: Campo Municipal La Bazán (San Fernando)
Hora: 22
Meteorologìa: 20°C Cielos despejados; vientos sur/sureste 1 km/h

El Bahía de Cádiz C.F. vuelve a visitar las instalaciones del campo de fútbol municipal La Bazán para enfrentarse al Chirigoteros FC. Una semana más el equipo gaditano no podrá contar con uno de sus ejes en el centro del campo, y es que Dani Ríos sigue resintiéndose de sus problemas musculares, por lo que los servicios médicos del club siguen negándole el alta deportiva.

Su lugar será ocupado por Gonzalo Arce, que parece estar recuperado de las molestias que la semana pasada impidieron que se vistiese de corto. Una semana mas vuelve Carlos a la medular, como pivote defensivo para ayudar a Pedro y a Javi Román a superar una de las parcelas más poderosas del equipo isleño.

Señalar que el conjunto rojillo estrenará su nueva equipación en este encuentro, con un cambio de diseño que, esperemos, traiga mejor suerte que los conjuntos anteiores.